La maniobra de la familia de Schumacher que alimenta el hermetismo sobre su estado
Primera vez en casi siete años que se desliza un movimiento de la familia de Michael Schumacher en torno a su misterioso estado de salud
El 29 de diciembre de 2013, Michael Schumacher comenzó la carrera más larga y dura de su vida, luchar contra las secuelas de un terrible accidente de esquí que le provocó severos daños cerebrales. Desde ese momento, su familia quiso bunkerizar todo lo relacionado con el estado de salud del piloto.
Se instauró la ley del silencio y nadie sabe cómo ha ido evolucionando el alemán desde aquel durísimo golpe en la estación de Mèribel (Alpes franceses). Hasta ahora. Según el prestigioso diario francés ‘Le Parisien’, una ambulancia ha trasladado a las 15.40 horas de este pasado lunes, al siete veces campeón del mundo hasta el Hospital Europeo Georges Pompidou en París.
Hospital Europeo Georges Pompidou de París / Gtres
Allí se encuentra ingresado en la Unidad de Monitorización del Departamento de Cirugía Cardiovascular para someterle a un «tratamiento secreto», según informan fuentes al citado medio. La familia transportó al campeón del mundo en una camilla y tapado con una lona azul que impedía verle la cara, escoltado por un fuerte dispositivo de seguridad compuesto por diez personas. Un férreo hermetismo que casa a la perfección con el empleado por su mujer e hijos durante todo este tiempo.
Schumacher está siendo atendido por Philippe Menasché, un reputado cirujano cardíaco de 69 años que fue pionero en poner en práctica una terapia celular para tratar la insuficiencia cardíaca. Además, en 2014 realizó un trasplante de células cardíacas embrionarias en un paciente con insuficiencia cardíaca. Una eminencia para curar y devolver salud al piloto de Fórmula 1 más victorioso de todos los tiempos.
Michael Schumacher en una imagen de archivo / Gtres
Cabe recordar que a principios de año, el ‘Daily Mail’ publicó que Shumacher no está encamado ni depende de ningún aparato médico para hacer una vida normal. Fieles a su mutismo, desde el núcleo más cercano a Schumacher siguen sin pronunciar una palabra acerca de la situación en la que se encuentra el campeón. Durante este tiempo, el germano ha estado en Suiza, en una casa completamente adaptada a sus necesidades médicas, recibiendo un tratamiento que, según medios internacionales, supondría un coste de cerca de 55.000 euros semanales.